Aumenta uso de minas antipersona por grupos armados irregulares

Ginebra, 26 Nov (Notimex).- En los últimos nueve años aumentó el uso de minas antipersona por grupos armados irregulares, asimismo se incrementó el número de nuevas víctimas registradas en todo el mundo durante 2014, alertó el informe del Monitor de Minas Antipersonal 2015.

Los países más afectados por este tipo de armas fueron Afganistán, Colombia, Irak, Libia, Myanmar, Pakistán, Siria, Túnez, Yemen y Ucrania, en donde los grupos armados no estatales plantaron minas antipersonal, un arma prohibida por tratados internacionales.

El informe del Monitor de Minas Antipersonal 2015 fue presentado este jueves por la Campaña Internacional para la Prohibición de las Minas (ICBL, por su sigla en inglés), ganadora del Premio Nobel de la Paz.

“Mientras el mundo ha hecho grandes progresos, el año pasado fue testigo de pasos hacia atrás en términos de nuevos usos y nuevas víctimas de minas antipersonal”, explicó a periodistas en Ginebra el jefe de programa y editor del Monitor 2015, Jeff Abramson.

“Si queremos acabar con el flagelo de las minas antipersonal, debemos hacer más para despejar los campos que permanecen contaminados y prevenir su uso por parte de grupos armados”, añadió Abramson.

De octubre 2014 hasta octubre 2015, los grupos armados no estatales han usado minas antipersonal, o artefactos explosivos improvisados activados por la propia víctima (los que suelen ser usados en ataques suicidas) que actúan como mina antipersonal, denunció.

“El Monitor no había registrado un número tan alto de países desde 2006″, lamentó.

“El nuevo uso de minas antipersonal por parte de grupos armados no estatales en conflictos como los de Ucrania y Yemen y un uso continuado a gran escala de artefactos explosivos improvisados activados por la propia víctima en Afganistán e Irak es preocupante”, dijo el investigador de Human Rights Watch y editor del capítulo de política de prohibición del Monitor, Mark Hiznay.

El uso de estos artefactos por parte de gobiernos permaneció en un nivel bajo, aunque fueron confirmados nuevos usos en 2014 y 2015 por las fuerzas gubernamentales de Myanmar, Corea del Norte y Siria, reveló el informe.

Detalló que todos esos países no forman parte de la Convención sobre la Prohibición de las Minas Antipersonal, que entró en vigor en 1999 y en la actualidad cuenta con 162 Estados parte.

Este tratado prohíbe el uso de minas que son detonadas por el contacto humano, por lo cual también incluye aquellos artefactos explosivos improvisados que son activados por la víctima en ataques suicidas, indicó.

El fuerte aumento de víctimas a causa de este último tipo de armas en Afganistán condujo a un incremento global del número de víctimas de minas antipersonal y otros restos explosivos de guerra registradas en 2014, para colocarse en tres mil 678, frente a las tres mil 308 documentadas en 2013.

“Este aumento del número de nuevas víctimas, después de tantos años, pone de relieve la absoluta necesidad de salvaguardar todos los principios de la Convención sobre la Prohibición de las Minas Antipersonal, tanto durante, como después del conflicto”, indicó Loren Persi, editora del capítulo de asistencia a víctimas del Monitor.

“Los países deben cumplir con sus compromisos para ayudar a cientos de miles de sobrevivientes de minas antipersonal con el mismo nivel de intensidad y precisión con el que descontaminan las tierras”, agregó Persi.

En 2014 hubo un promedio de 10 víctimas por día, en comparación con las 25 diarias que se registraron en 1999, la gran mayoría, un 80 por ciento, de las víctimas fueron civiles, igual que en los últimos informes.

El Monitor documentó que al menos existen 225 mil sobrevivientes de minas antipersonal, aunque prevé que el número puede ser mucho mayor.

Según estimaciones, existen más de 110 millones de minas antipersonal repartidas en más de 64 países, cada año mueren miles de personas o sufren mutilaciones debido a la explosión de este tipo de armas, las cuales pueden permanecer activas durante más de 50 años.

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