Disuelven con bombas lacrimógenas marcha opositora en Caracas, hoy 20 de marzo de 2014

Marcha opositora en Caracas es disuelta con chorros de agua

Centenares de estudiantes y ciudadanos de todas las edades que portaban banderas de Venezuela y lanzaban consignas en rechazo a las detenciones de los alcaldes de San Diego, Enzo Scarano, y de San Cristóbal, Daniel Ceballos, fueron dispersados.

Los alcaldes fueron detenidos la noche de este miércoles en sus respectivos municipios.

Los manifestantes pretendían trasladarse del conurbado municipio Baruta a la sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia (SEBIN), para rechazar también “la aprehensión injustificada de estudiantes”, en las protestas opositoras del último mes en el país.

Cordones de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) y de la Guardia Nacional bolivariana (GNB), se concentraron desde temprana hora en los alrededores de Plaza Venezuela y de la Universidad Central de Venezuela, por donde los manifestantes pretendían marchar.

La manifestación fue convocada por el presidente de la Federación de Centros Universitarios (FCU), Juan Requesens, quien encabezaría la movilización, apoyada por la Mesa de la Unidad Democrática y los alcaldes de oposición.

Numerosas bombas lacrimógenas lanzaron los guardias nacionales a la concentración de estudiantes en Colinas de Bello Monte para dispersar la manifestación, que duró unas tres horas desde que comenzaron a congregarse los jóvenes.

El gobernador del estado Miranda, Henrique Capriles Radonski, se pronunció acerca de la detención de los alcaldes y calificó la acción como “fascismo puro”, al tiempo que pidió al pueblo venezolano movilizarse en forma pacífica.

El también excandidato presidencial dijo a periodistas que con esas detenciones, el gobierno del presidente Nicolás Maduro demuestra que “ni quiere diálogo ni quiere paz, ni quiere que el país se unifique”.

Alertó “al pueblo y al mundo que aquí en el país puede estar en marcha, en desarrollo, un autogolpe promovido por sectores del propio gobierno (…) lo de ayer es claramente un llamado a que continúe la confrontación”.

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