Renuncia Lakhdar Brahimi como representante de la ONU para Siria

Lakhdar Brahimi, enviado especial de la ONU

En conferencia de prensa, Ban Ki-moon asentó que “he decidido aceptar la solicitud de Lakhdar Brahimi de renunciar a sus responsabilidades como representante especial conjunto” de la ONU y la Liga Árabe para Siria.  La renuncia, indicó el titular de la ONU, será efectiva a partir del 31 de mayo, luego de casi dos años en que Brahimi “buscara poner fin a la brutal y cada vez peor guerra civil en Siria”.

Ban criticó que los esfuerzos de Brahimi “no recibieron el debido apoyo” del Consejo de Seguridad ni tampoco de los países con influencia en la crisis en Siria, lo que representa “un fracaso para todos nosotros”.

Expresó que el trabajo de Brahimi, quien sustituyera al ex titular de Naciones Unidas (ONU), Kofi Annan, como mediador en Siria, había sido realizado en medio de una comunidad internacional dividida, pese a lo que perseveró con paciencia.

Brahimi fue clave en la organización de las conferencia de paz de Ginebra II, de enero pasado, que por un momento dieron esperanza de que un acuerdo diplomático podría ser posible para terminar la violencia en Siria, iniciada en marzo de 2011.

En ese sentido, Ban pidió a las partes en conflicto que “mostraran sabiduría y un sentido de responsabilidad que pudieran permitir una salida a esta pesadilla. También reitero mi opinión de que debe haber rendición de cuentas a los crímenes que se cometen y han sido cometidos”.

El titular de la ONU expresó que tales crímenes incluyen la prohibición de entregar ayuda humanitaria a las comunidades, lo que equivale a buscar su inanición de manera deliberada.

Por su parte, Lakhdar Brahimi afirmó que la renuncia para él era un momento “muy triste”, debido a que debía dejar sus esfuerzos en Siria en un punto en que el país pasaba por “un estado tan malo”. “Todos aquellos que tienen una responsabilidad y una influencia en la situación deben recordar que la cuestión es cuántas más muertes, cuánta más destrucción deben suceder antes de que Siria regrese a ser lo que conocimos”, enfatizó.

Brahimi, argelino, de 80 años de edad, fue nombrado como enviado especial de la ONU y la Liga Árabe para Siria en septiembre de 2012, después de la dimisión de Annan, quien desempeñaba esas labores desde el 23 de febrero de ese año.

Entre los candidatos que se mencionan para remplazar a Brahimi destacan el ex ministro de Defensa y de Exteriores así como ex embajador ante la ONU de Túnez, Kamel Morjane, gran favorito, así como al ex secretario general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN, 1995-1999) Javier Solana y el exprimer ministro de Australia, Kevin Rudd.

La guerra civil en Siria ha causado al menos 150 mil muertes, y casi 10 millones de personas requieran de ayuda humanitaria de emergencia para subsistir, de acuerdo con la ONU.

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