El encuentro tuvo lugar en el mismo estudio en el cual Jorge Mario Bergoglio se reunió con la reina Isabel II de Inglaterra, el pasado 3 de abril, y que se encuentra en la parte trasera de la sala de audiencias Aula Pablo VI, en los Jardines Vaticanos. Según confirmaron fuentes oficiales, durante el diálogo se abordaron temas como el impacto social del desempleo juvenil, la situación en España y la situación internacional, así como el conflicto en Ucrania.
Poco después de las 12:00 horas local (10:00 GMT), los reyes llegaron a bordo de un vehículo negro hasta la Plazoleta del Hongo, donde fueron recibidos por el prefecto de la Casa Pontifica, el arzobispo alemán Georg Gänswein.
Algunos minutos antes había llegado hasta el mismo lugar el Papa Francisco, a pie, vestido de blanco sin ningún ornamento particular acompañado únicamente por uno de sus escoltas. Previo a la audiencia con el pontífice, los reyes saludaron brevemente al número dos del Vaticano, el secretario de Estado, Pietro Parolin.
Luego, en un pequeño estudio, tuvo lugar el coloquio privado. Al finalizar el intercambio de regalos. Los soberanos obsequiaron a Francisco dos libros con la obra mística de San Juan de la Cruz y Santa Teresa de Jesús. Ellos se encuentran en Roma desde el viernes y la víspera asistieron a la ceremonia de canonización de Juan XXIII y Juan Pablo II en la Plaza de San Pedro. Al final de la celebración saludaron brevemente al líder católico.