La dependencia indicó en un comunicado que la nave fue detectada por un avión de la Guardia Costera la tarde del sábado pasado al norte de la frontera marítima entre Estados Unidos y México, y dentro de la denominada Zona Económica Exclusiva.
Un bote patrullero de la Estación de Guardia Costera, en la isla del Padre, interceptó la lancha a unos 20 kilómetros al norte de la frontera con 48 pargos a bordo, precisó la nota de prensa.
Los cinco ciudadanos mexicanos a bordo de la lancha fueron detenidos y entregados luego en la estación de la isla del Padre a personal de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza para su procesamiento y deportación a México.
La Guardia Costera aseguró que otras cuatro embarcaciones similares también fueron vistas en el área, pero pudieron regresar a México antes de ser interceptadas y detenidas.
“Lo que vimos fue una flota de buques de pesca extranjeros que probablemente cometían importantes e intencionales violaciones a la ley, dijo el comandante Daniel Deptula, oficial de la Guardia Costera en el sector de Corpus Christi.
“Desafortunadamente, esta explotación ilegal de pargo rojo ha sido un problema persistente para las agencias federales y estatales y una amenaza para las futuras temporadas de pesca deportiva y comercial en el sur de Texas“, indicó.