En el marco de una reunión con abogados internacionales, contratados por Chile para su defensa ante la demanda marítima de Bolivia, Muñoz dijo que se trata de “un argumento francamente absurdo, porque se basa en los distintos momentos en que ha habido negociaciones”.
Tras reconocer la existencia de varias conversaciones y negociaciones entre ambos países, el ministro chileno indicó que “ninguna propuesta en una negociación internacional puede significar una obligación si esas negociaciones fallan”.
Muñoz indicó que el punto central del debate sostenido esta mañana con los abogados y asesores de la cancillería fue la presentación o no de una excepción preliminar a la Corte Internacional de Justicia de La Haya para que se declare incompetente para conocer la demanda.
En la cancillería se discutió este lunes si la objeción se presenta antes del 15 de julio, meses después de que Bolivia presentara su “memoria”, o se incluye en la contramemoria chilena, para lo cual hay plazo hasta el 18 de febrero del próximo año.
Respecto a la eventualidad de que Chile objete la competencia de la Corte, el canciller chileno advirtió que “no se trata de reaccionar más rápido o postergarlo, sino qué es lo que le conviene más a Chile.