Arnaud ‘Sean’ Garnier tenía el mismo sueño que el de miles y miles de jóvenes de todo el planeta: jugar la final de la Copa del Mundo de fútbol. A pesar de que demostraba un grandísimo talento en las categorías inferiores del Auxerre y del Troyes las lesiones terminaron demasiado pronto con su carrera futbolística.
Lo que los esguinces y las torceduras no han podido hacer es terminar con su talento y sus ganas de balón. Así, en 2008 este galo de calidad irrepetible se convirtió en el campeón del primer torneo de Street Style. Desde entonces su fama no ha parado de crecer. Su estilo mezcla el deporte con el breakdance, el basket, el humor…y un técnica una para hacer trucos imposibles con el balón.