Ya en varias ocasiones el líder católico invitó públicamente en sus alocuciones a leer las sagradas escrituras, aunque sea una simple oración de las mismas, y para hacerlo señaló que era útil tener siempre a mano unos evangelios chiquitos.
“Para ayudar a poner en práctica esta invitación, enviando un claro mensaje, domingo próximo por voluntad del Papa Francisco serán distribuidos a los fieles presentes en la Plaza de San Pedro, gratuitamente como regalo del santo padre, miles de Evangelios en formato de bolsillo”, indicó la sala de prensa vaticana.
La iniciativa recuerda también la distribución de las “misericordinas” algunos meses atrás, una particular medicina espiritual que por fuera es una caja con diseño como el de cualquier droga, pero dentro tiene un rosario en lugar de pastillas.
Tras la “receta” que suscribió el pontífice, el 17 de noviembre pasado, ese peculiar objeto devocional cobró tanta fama que comenzó a ser vendido en las tiendas cercanas al Vaticano a un precio de hasta cinco euros (unos siete dólares).
El regalo ha sido organizado por la Limosnería Apostólica, organismo que fundó como el “brazo caritativo” del Papa Francisco, en coordinación con 150 boy scouts, pupilos del Seminario Romano, religiosas de la Madre Teresa y otras personas. Los libritos fueron impresos por la Tipografía Vaticana en una edición que no será vendida y contiene los cuatro Evangelios además del libro de los Hechos de los Apóstoles.