* Por primera vez salen del Hermitage para mostrar una faceta poco explorada del cineasta
* Música de Las Ultrasónicas, David Bowie y U2 en el “Playlist” que acompaña la exhibición
Por María del Carmen Varela
México, 6 Dic (Notimex).- Aunque por mucho tiempo fueron censurados por su propia viuda, los dibujos eróticos del dramaturgo y cineasta ruso Sergei Eisenstein fueron finalmente entregados al Museo Estatal del Hermitage, que por primera vez los deja salir del recinto para ser presentados en México, como una primicia en el continente americano.
Actualmente se exhiben en la sala Paul Westheim, del Museo del Palacio de Bellas Artes (MPBA), como parte de la magna muestra “Vanguardia rusa. El vértigo del futuro”, la cual reúne más de 500 obras.
Pinturas, maquetas, bocetos de vestuario, filmes, carteles, fotografías, libros, dibujos, collages, cerámicas, esculturas, instalaciones y material documental, elaboradas por más de 100 artistas rusos entre 1911 y 1948, integran el acervo.
En la sala nueve del Museo, el recorrido permite apreciar 33 obras especialmente recomendables, por tratarse de imágenes nunca antes vistas en el continente, y porque en su mayoría fueron elaboradas por Eisenstein durante una estancia en este país para filmar la película “¡Viva México!”, la cual nunca concluyó.
Son 33 láminas en grafito y colores rojo, azul y verde, al parecer los favoritos del artista, en las que lo mismo hay plasmadas fantasías explícitas que contienen actos de necrofilia, homosexualidad y escenas orgiásticas, que asociaciones del subconsciente con la muerte y el sexo, el horror y el éxtasis, la pasión y hasta la religión.
Entre las más fuertes figuran las tituladas: “A los corazones de Verlaine y de Rimbaud”, “Paul y Arthur”, “Historias divertidas sobre el muchacho de 3 piernas”, “Monje delante de la estatua de una santa”, “La corrida” y la serie sobre “Dos figuras sobre una mesa de vidrio, vista interior”, por citar algunas.
De acuerdo con las notas del MPBA, este material más que ser visto como entretenimiento, debe entenderse como una profunda vertiente creativa de Eisenstein, para quien, “se trata de obras que sacuden la rigidez moral conservadora en las cuales están presentes la violencia, la profanación, el sadismo y la muerte”.
Helena Rangel, editora del Museo, habló a Notimex del valor de la muestra dedicada a este cineasta ruso, de origen judío, al que si bien se conoce por sus trabajos en teatro y cine, poco se le ha explorado como autor de dibujo erótico, quizá, dijo, porque eran dibujos que hacía en su cotidianidad, de ahí que algunos estén trazados en las hojas de los hoteles en los que se hospedaba en ese momento.
“De hecho, han sido pocas las veces que se han expuesto y esta es la primera vez que se exhiben en el continente y, desde luego en México, porque cuando muere Eisenstein, su esposa los separa y los deja fuera del material que entrega al Hermitage, un poco por pena, por considerar que no son dignos de marcar la línea de trabajo del artista”, expuso Rangel.
Recordó que con el paso de los años y la mayor apertura en ese país, las imágenes fueron finalmente incorporadas al archivo de su obra en el Hermitage y ahora este esfuerzo por presentar la vanguardia rusa las ha traído a México.
La idea es dar cuenta de una nueva lectura a la creación de Eisenstein, fuertemente influenciada por Sigmund Freud y la evidencia de ello en cintas como “El acorazado Potemkin” (1925) o “Iván el terrible”, cuya primera parte se estrenó en 1944.
Sin duda, añadió, es una faceta muy interesante para el tiempo en el que se desarrolla la trayectoria de Eisenstein, y su exhibición, de alguna manera abre la brecha para que en un futuro los investigadores sigan explorando esta faceta que resulta fundamental para el desarrollo de las artes en general.
María Halttunen, del Museo Estatal Hermitage, en un ilustrativo ensayo incluido en el catálogo de la muestra, considera a estos dibujos como “una de las manifestaciones más raras en el arte de la primera mitad del siglo XX”.
“Se puede afirmar que Eisenstein realizó las más provocativas imágenes y que éstas no perdieron su agudeza después de muchas décadas transcurridas a partir del momento de su creación”, señala la especialista, para quien el creador encarna en la realidad todos los miedos del subconsciente y los saca a la luz en estas imágenes que, por ahora, sólo se podrán apreciar en la capital mexicana.
Y es que según Helena Rangel, del MPBA, actualmente no existe la intención de llevar esta muestra a otras ciudades de México o del continente, por lo que la muestra completa regresaría a los museos rusos que han colaborado con esta selección, que el visitante puede acompañar de una “playlist” en “Spotify” con música de Las Ultrasonicas, U2 y David Bowie, entre otros artistas.
Es muy importante precisar, dijo, que no habrá prórroga y sólo quedan unos dos meses para que los capitalinos asistan a esta muestra que, además de las nueve salas de exhibición, tiene una serie de actividades paralelas.
Entre ellas, varias mesas de reflexión y una muestra de cine ruso en la Cineteca Nacional, que incluyó películas como “La huelga” y “El acorazado”, del propio Eisenstein.