Por Manuel Bello Hernández. Enviado
Guadalajara, Jal., 4 Dic (Notimex).- Como una mujer que tanto en su prosa como en su poesía, conferencias y cartas, abordó temas fundamentales del panorama mundial, además de ser promotora del voto femenino en Chile, fue recordada hoy la escritora chilena Gabriela Mistral (1889-1957) en la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara.
A 70 años de que la escritora recibió el Premio Nobel de Literatura (1945), los escritores chilenos Gustavo Barrera, Manuel Peña y Diego del Pozo, elogiaron su obra literaria y destacaron sus aportes en los ámbitos social, político y cultural.
Al tomar la palabra, Gustavo Barrera ofreció un breve panorama sobre la trayectoria de la autora de obras como Desolación, Ternura y Tala, a quien recordó como una mujer que desarrolló una extensa obra poética y en prosa que la situó como una de las voces americanas más potentes del siglo XX.
Rememoró que sus primeros poemas fueron publicados en las páginas de La Voz del Elqui y El Coquimbo, bajo diferentes seudónimos, y en 1914 cuando recibió el Premio de los Florales por su obra Los sonetos de la muerte decidió adoptar el nombre de Gabriela Mistral en referencia al viento que sopla de las costas del Mediterráneo y en homenaje a los escritores Gabriel Danucio y Federico Mistral.
Indicó que en 1922, Mistral fue invitada por el gobierno de México a participar como principal gestora de la reforma educacional, vivió fuera de Chile y recorrió gran parte de América y Europa.
Tras citarla como la primera mujer chilena en ocupar un cargo diplomático, Gustavo Barrera definió a la homenajeada como una mujer adelantada a su época, pues el voto femenino, no fue una realidad en Chile sino hasta 1934 para elecciones municipales y hasta 1944 para el sufragio universal.
Refirió que la escritora estuvo entre los primeros que advirtieron sobre el peligro fascista y se negó a ser cónsul en una ciudad italiana gobernada por Benito Mussolini; mientras que en la Guerra Civil Española, apoyó la causa de los republicanos.
En su oportunidad, el investigador en literatura infantil Manuel Peña, mencionó que Mistral inició su vida literaria en México luego de ser invitada por José Vasconcelos a contribuir a la educación mexicana y escribir distintos libros, entre ellos, una antología de poesía y cuentos de la tradición oral titulada Lecturas clásicas para niños.
Compilóleyendas, cuentos de la tradición oral de países como África, China, de México y Latinoamérica, porque consideraba que los niños debían tener contacto con una literatura multicultural, especialmente de la tradición oral, señaló.
También dijo que Mistral apostó por la recreación estética que produce el libro en el niño, inspirada en el cubano José Martí, a quien admiraba.
Tras citar a algunos personajes que fueron sus referentes de fantasía como Jonas, Adán y Eva y Moisés, Mistral realizó sus propias versiones sobre literatura infantil, dijo Peña.
Al interesarme en la literatura infantil de Mistral, cubrí cuatro versiones que por primera vez se publican en forma de libros independientes, después de estar 95 años publicados en revistas o suplementos culturales, comentó el investigador para quien la obra de la escritora chilena sigue vigente.
En su oportunidad, Diego del Pozo hizo un acercamiento a la visión política de Mistral y subrayó la importancia de estudiar a 70 años de que recibió el Premio Nobel de Literatura, porque su poesía se ha duplicado y es muy actual. Estudiarla nos da una identidad latinoamericana.
Destacó que a pesar de que algunas de sus ideas y pensamientos eran políticos, Mistral los llevó a su prosa, siendo muy política, gozaba de libertad intelectual y en ese sentido la política a la que me refiero tiene que ver con su sentido etimológico, con la polis, es decir, las responsabilidades que tiene cada uno de los ciudadanos en una sociedad ya sea comunitaria, nacional o continental, concluyó.