Se destrozó el rostro con una escopeta, este es el resultado después de un trasplante de cara

Muchas veces la gente suele tomar decisiones radicales sobre su vida, como esta chica que se disparó en el rostro con una escopeta y quedó completamente desfigurada.

At 18 years old Katie Stubblefield lost her face. At age 21 she became the youngest person in the U.S. to undergo a face transplant. Since 2014 when the almost fatal accident occurred she has undergone more than 24 operations. Dr. Spiegel was one of the earliest surgeons performing microvascular surgery and he has been on panels about Katie and her case. #natgeo #nationalgeographic #plasticsurgeon #plasticsurgery #bostonplasticsurgery #katiestubblefield #facetransplant #microvascularsurgery

A post shared by The Spiegel Center (@thespiegelcenter) on Aug 16, 2018 at 8:02am PDT

Afortunadamente, la chica será parte de un proyecto médico en el que se volverá una más de las personas que recibirán un trasplante de cara.

Su nombre es Katie Stubblefield, y a sus 18 años sera una de las chicas más jóvenes que han recibido este tratamiento que marca punto y aparte en el mundo de las cirugías.

Esto fue lo que la llevo a tener un trasplante de cara

Katie recibió el trasplante de cara en Ohio, y fue gracias a una donante de órganos que más de 30 doctores se dispusieron a reestablecer la carta de presentación de Stubblefield.

Trasplante historico #KatieStubblefield es la persona más joven en la historia de ?? en recibir un #trasplante de cara. Todo empezó hace 4 años, cuando ella decidió suicidarse disparándose con un rifle. El disparo le destruyó la cara, pero sobrevivió. Katie tuvo que ser operada 22 veces antes de poder recibir su nuevo rostro. La nueva #cara llegó por la #donación de la #abuela de una mujer que había muerto por #sobredosis. Finalmente la operación se hizo en mayo de 2017 y duró 31 horas. Todo el proceso quedó documentado por dos fotografas

A post shared by Textual Radio ? (@textualradiook) on Aug 15, 2018 at 7:05pm PDT

Y es que la chica tuvo tantos problemas en su adolescencia que decidió terminar con su vida, así que tomó una escopeta y se disparó. Pero nada salió como esperaba puesto que lo único que logró fue desfigurar su rostro.

Se quedó sin nariz, mandíbula, perdió la vista y de su juvenil sonrisa no quedó absolutamente nada, pero ahora con el trasplante de cara logrará recuperar años vitales.

Fue la revista National Geographic la que documentó el desarrolló de esta conmovedora y fuerte historia de una chica que podrá volver a vivir su vida con normalidad.