Es de todos sabido que algunos perros son entrenados y utilizados durante actividades policiales, esto gracias a su grandes habilidades con el olfato y a la hora de las persecuciones a pie, poder atrapar de manera más rápida a los criminales, y esas labores nunca son tan reconocidas, como ahora lo han hecho en Sudamérica.
En Ecuador se le ha dado un “reconocimiento” a 16 perros policías que se han retirado de sus deberes.
Los perros eran parte de la unidad K-9 del departamento de policía que ya han alcanzado los ocho años de edad, los cuales sirven para poder retirarse de sus deberes en la búsqueda de drogas, control de multitudes, búsqueda y rescate y relaciones públicas.
Los perros se sentaron de manera tranquila con sus manipuladores a lo largo de una solemne ceremonia mientras los oficiales de policía daban un discurso en donde recordaban su gran deber dentro de la fuerza y recordaban a los que habían perdido la vida en servicio. Tras haber finalizado la ceremonia, los oficiales pasearon a los perros por una alfombra roja que los dirigía a las familia que habían decidido adoptarlos.
El oficial Luis Monar dijo, tras homenajear a su compañero en los años de deber canino Tyron, que se encontraba triste, pero al mismo tiempo feliz de poder verlo ir con una buena familia y que además planeaba mantenerse en contacto.
Varias de las familias que se decidieron por adoptar a uno de los perros, habitan en granjas a las afueras de la capital, Quito.
Los animales de esta manera podrán seguir teniendo una gran actividad física en grandes pastizales y campo abiertos para que todo ese entrenamiento que tuvieron a lo largo de los años no desaparezca apenas unos días después de haberse retirado de su deber dentro de la seguridad del país ecuatoriano.