Al clausurar la conferencia mundial “Proyecto Europa”, organizada por el Instituto Berggruen para la Gobernanza que durante dos días reunió a dirigentes políticos del continente, dijo que la UE se enfrenta a una crisis de confianza “que promueve una minoría que crece cada día”.
Ante dirigentes políticos de diversos países de la UE, aseguró que el bloque europeo debe ayudar a resolver el problema de las migraciones “de una forma integral y solidaria” y que ese escepticismo europeo “no levante fronteras entre los países”.
“Como con la existencia del euro, el antieuropeoísmo y la demagogia pretenden cuestionar todo lo de la UE, como es la libertad de circulación”, alertó Rajoy. “Si pusimos esfuerzos en salvaguardar el euro debemos hacerlo para salvar todos los principios como la libre circulación de personas”, llamó.
El mandatario de España expuso que la libre circulación de personas es igual de importante que la de capitales y servicios, y ante eso se debe ser consecuente en defenderla, por lo que este tema será un reto en las elecciones europeas de mayo próximo. “Las elecciones serán determinantes para el futuro de Europa y es deseable que el resultado asegure la gobernabilidad de Europa”, manifestó.
Rajoy enfatizó que es necesario que en el Parlamento Europeo (PE) haya mayoría de fuerzas “que crean en la integración europea, que apuesten en integración, y se aspiren a la solidaridad entre europeos y no a la disgregación y levantar fronteras”.
“Las fuerzas escépticas están al asecho para dinamitar nuestro proyecto, lo hacen desde adentro y se basan sólo en la desconfianza, y nosotros por eso debemos explicar la realidad a los ciudadanos”, comentó. Insistió en que se quiere asegurar una UE “sin fronteras interiores, que gestione esto de manera integrada y solidaria, que la inmigración sea opción y no obligación”.