“Los colegios y las universidades necesitan confrontar los hechos de la violencia sexual”, dijo el vicepresidente estadounidense, Joe Biden, en respuesta al reporte dado a conocer aquí por un grupo de trabajo creado por Barack Obama en enero pasado.
Biden señaló que las autoridades educativas no pueden continuar ignorando el problema “pretendiendo que no existe. Necesitamos darle a las víctimas el apoyo que necesitan y necesitamos llevar ante la justicia a los perpetradores”.
Entres sus recomendaciones, el grupo propuso que las universidades y colegios de manera voluntaria lleven a cabo sondeos periódicos a partir del próximo año a fin de conocer lo que sucede en sus campus en este sentido.
Sin embargo, la propuesta es promover una iniciativa de ley para hacerlos obligatorios a partir de 2016. “Con una mejor fotografía de lo que está pasando realmente en los campus de las escuelas, seremos más efectivos para atacar el problema y medir el éxito de sus esfuerzos”, indicó el grupo en su reporte.
El grupo propuso también establecer políticas que promuevan la intervención de testigos de hechos de este tipo, en particular de los hombres. Con este propósito, el grupo dará a conocer anuncios públicos con la participación de Obama, de Biden así como de personalidades y actores.
El grupo explicó que sus recomendaciones y acciones buscan identificar los alcances del problema, ayudar a prevenir estos incidentes, ayudar a las escuelas a responder a este tipo de situaciones y mejorar y hacer más transparentes los esfuerzos del gobierno en este ámbito.
La Casa Blanca dijo que las acciones anunciadas por el grupo de trabajo son el primer paso de su esfuerzo para poner fin a este problema que se estima afecta a una de cada cinco mujeres que atienden instituciones de educación superior.