Emergencia en Georgia por tormenta invernal

La declaratoria de emergencia produjo que el gobernador del estado y el alcalde de Atlanta fueron centro de duros cuestionamiento por su lenta respuesta a la tormenta que golpeó a la zona el pasado 28 de enero provocando un caos vial durante varios días. “He instruido a la Patrulla Estatal, al Departamento de Transporte y al Departamento de Recursos Naturales a empezar a mover recursos hacia las áreas donde se espera la nieve”, señaló el gobernador Nathan Deal.

Un creciente número de escuelas de Georgia empezó a cancelar actividades académicas en anticipación de la tormenta, luego que las autoridades emitieron una alerta que cubre los condados del norte del estado a partir de las 19:00 locales.

Durante la pasada tormenta de enero, los sistemas escolares se mantuvieron inicialmente abiertos. Cuando decidieron cerrar era demasiado tarde y miles de alumnos quedaron atrapados en las escuelas, mientras que muchos padres durmieron en tiendas departamentales.

El Servicio Meteorológico Nacional anticipó un frente frío golpeará al llamado Sur Profundo de Estados Unidos, a raíz de la presión que ejerce una capa de humedad procedente del Golfo de México, que abarcará Texas y la costa atlántica media y sur del país. “Aunque la acumulación total de precipitación puede ser de ligera a moderada y existe suficiente aire frío para generar nieve, agua hielo y lluvia congelada”, señaló.

La lluvia congelada es particularmente peligrosa porque una vez que se adhiere al pavimento genera una superficie similar a la de una pasta de patinaje, una condición que genera la mayor parte de accidentes automovilísticos. De acuerdo con la proyección del Servicio Meteorológico, los niveles de acumulación de nieve y hielo podrían ser mayores el martes y en la mañana del miércoles. Las autoridades indicaron que de consumarse las estimaciones, la tormenta podría impactar otras zonas de la costa este en los próximos días.

Se trata de una de las peores temporadas invernales que azotan Estados Unidos en los últimos años, con olas de viento ártico que han deprimido las temperaturas a niveles históricos, en algunos estados a menos 50 grados centígrados.

Desastres NaturalesescuelasEstados UnidosGeorgiainvernalTexastormenta