No hay forma más simple de encender la pasión y salir de la rutina que hablando sucio en la cama, por ello, sigue estos consejos y vuélvelo loco en la cama.
El lenguaje erótico sería el símil al ‘toqueteo sensual’, sin embargo, es primordial que tientes el terreno y sepas si realmente esta técnica le subirá la libido a tu pareja o lo considera una práctica ‘innecesaria’.
El segundo paso para aprender a hablar sucio es borrar tabúes y quitarte de la cabeza que eso es ‘cosas de mujerzuelas’ y deja fluir tu lado más erótico de forma verbal, ¡no te reprimas!.
Es necesario saber que el llamado ‘dirty talk‘ no es sinónimo de palabras obscenas o groserías, sino de expresar de manera directa y real lo que quieres y sientes, así, los gemidos y suspiros entran también en el rango del lenguaje erótico.
Una manera eficaz para aprender a hablar sucio en la cama es iniciar con frases simples, con el tono adecuado y en el momento oportuno; por ejemplo: “soy toda tuya” o “qué quieres que te haga hoy” dan pie a excitar a la pareja, y si son dichas mientras el realiza una actividad rutinaria como ‘ponerse la pijama o ver la televisión’ lo harán reaccionar y llevarte a la cama.
Si te da miedo decirlo de frente, otra opción para iniciar el ‘lenguaje sucio’ en la relación es una llamada telefónica o un mensaje de texto.
Existen algunas frases ‘populares’ de lenguaje sucio como ¡dime vaquero! ¡quiero más! ¡cógeme! ¡Métela! que te pueden funcionar, sin embargo, el ‘tono’ es el siguiente paso a cuidar, nunca lo digas con tono de niña ‘chiqueada’, es mejor acompañar esas frases con gemidos o suspiros y decirlo ‘directo’.
La técnica para hablar sucio en la cama es: decir lo que deseas, decir que te gusta de lo que él hace, dar órdenes o narrar fantasías sexuales, la práctica hace al maestro, por ello entre más conversaciones ‘subidas de tono’ tengan el sexo será mucho más placentero.
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Virgo 23 agosto – 22 septiembre
Persona meticulosa, analítica, crítica, precisa, metódica, laboriosa, reservada, ordenada y modesta.